La
llegada del Wi-Fi a los lugares públicos marcó un antes y un después en el día
a día de los usuarios interconectados, dado que permite aprovechar el servicio
de internet ya sea solicitando una contraseña o directamente mediante una red.
ESET, compañía líder en detección proactiva de amenazas, comparte puntos claves
a los que hay que prestar atención cuando se trata de redes y la seguridad de
las mismas.
“Si
tan solo nos detuviéramos unos minutos para pensar en qué tan seguras son las
conexiones públicas, rápidamente encontraríamos varios motivos para dar una
respuesta negativa a su acceso. Si al visitar un lugar público no dejamos
nuestras pertenencias en cualquier sitio, porque conocemos los riesgos de
hacerlo, ¿por qué lo haríamos con la información almacenada en nuestros dispositivos?”,
advierte Camilo Gutierrez, Jefe del Laboratorio de ESET Latinoamérica.
Algunos
de los riesgos a los que se está expuesto al utilizar redes Wi-Fi públicas,
son:
-
Ser víctima de un ataque “Man in the
Middle” (traducido sería “hombre en el medio”): Está relacionado con la
presencia de un intermediario entre la víctima y el sitio que ésta visita,
pudiendo el cibercriminal acceder a los datos mientras viajan.
-Robo de datos personales, informaciones
confidenciales y/o credenciales: Si la red Wi-Fi no es lo suficientemente
segura, los datos de la computadora o teléfono (archivos personales o
contraseñas) pueden quedar expuestos y podría tener consecuencias más graves si
se conecta a esta red desde un equipo de trabajo, donde probablemente haya información
confidencial.
-Estar en riesgo al realizar una
transacción en línea: Son muchos los usuarios que siguen
realizando compras y transferencias online o ingresando a Homebanking
conectados a la red Wi-Fi de algún café, hotel o aeropuerto. Sin importar desde
qué dispositivos sea la conexión, el uso de una red pública siempre representa
un riesgo para realizar cualquier acción que involucre algún dato privado,
porque no se tiene conocimiento si alguien está interceptando el tráfico.
-Falsos puntos de acceso se
presentan como redes sin clave: Si bien nunca es
recomendable conectarse a redes sin clave, de hacerlo es aconsejable consultar
cuál es el nombre de la red de ese lugar para comprobar que efectivamente sea
el que se observa en el dispositivo y, por otro lado, es posible que la misma
sea clonada y al conectarse todos los paquetes de conexión que entren y salgan
pasarán por el equipo atacante, quien podrá ver y modificar todo a voluntad.
-Router vulnerado:
Existen vulnerabilidades presentes en routers. Podría traer consecuencias como
secuestro del ancho de banda, o incluso convertir a los dispositivos infectados
en partes de una botnet. Sin una mínima protección básica, como la modificación
de la contraseña predeterminada, el router puede convertirse en la puerta de
entrada para que un atacante logre acceder a cualquier dispositivo que esté
conectado a él.
De
manera de evitar caer en engaños o ataques, desde el Laboratorio de ESET
Latinoamérica se acercan cinco recomendaciones para conectarse a redes Wi-Fi
públicas de manera segura:
Mantener la solución de seguridad y
el sistema operativo actualizados:
Es primordial mantener siempre
actualizado el Sistema Operativo y las
aplicaciones del sistema, aplicando los parches de seguridad que lanzan
los fabricantes y protegiendo así los equipos.
Cuidar las acciones
que se realizan desde estas conexiones:
Al conectarte a una red Wi-Fi
pública, es aconsejable usar Internet para visitar sitios que no requieran credenciales ni información personal,
como portales o diarios.
Ingresar a sitios web
que utilicen protocolo HTTPS:
El mismo garantiza que la
información transmitida entre la computadora del usuario y el sitio web sea cifrada en la transmisión. Debido a
que desde dispositivos móviles y/o tablets se ejecutan prácticamente
las mismas acciones que desde cualquier equipo de escritorio o laptop, es
importante conocer si al ingresar a un sitio web éste utiliza el protocolo
seguro de navegación.
Configurar el
dispositivo para que pregunte antes de conectarse:
Para evitar que la conexión
sea automática y evitar posibles riesgos, se recomienda configurar los
dispositivos para que se pregunte antes de conectarse a la red de algún sitio.
De esta manera permite analizar si se trata de una red segura antes de realizar
la conexión.
Utilizar Doble Factor
de Autenticación:
Nunca está de más tener una
capa extra de seguridad como la que aporta el doble factor de autenticación.